Marisol Carrera: “Ayudaré a reconstruir el tejido social de San Francisco”

Especialista en temas de familia, derechos humanos y resolución alterna de conflictos, Marisol Carrera llega a ser la primera jueza de paz comunitaria de San Francisco, obteniendo el cargo por votación unánime de la Comisión Técnica.

Texto y fotos: Andreína Rodríguez González

Licenciada en Derecho y Ciencias Políticas de la Universidad Latina de Panamá (ULACIT) y magíster en temas de familia, Marisol Carrera se ha convertido en la primera jueza de paz para el corregimiento de San Francisco.

“Tengo claro que nuestro principal objetivo es hacer una justicia más expedita, eficiente y que procure reparar el daño antes que condenar a alguien”, inicia su diálogo.

De trato afable y cálida personalidad, la abogada cuenta con 18 años de experiencia en temas familiares, la mayoría de estos dentro del Órgano Judicial a través de la práctica de la resolución alterna de conflictos.

Experiencia laboral

A través de concurso, Carrera llegó a ejercer en los juzgados municipales de familia; niñez y adolescencia; en el tribunal de menores y como secretaria judicial.

Previo a asumir su última labor como asistente de magistrado del Primer Tribunal Superior Civil, comenzó a litigar simultáneamente. “No hallaba el punto exacto para ser efectiva impartiendo justicia”, comentó.

“En Civil vi procesos de hasta 30 años que no llegaban a feliz término porque se dilataban tanto que, falleciendo la víctima, continuaban la disputa sus herederos”.

Respaldo popular

Apoyada por las asociaciones de residentes de Boca La Caja, San Sebastián y Carrasquilla, la jueza perfila su gestión abocada a restituir las relaciones vecinales en medio de la disparidad urbana del corregimiento.

“Nos desentendimos del vecino y eso ha llevado a subestimar el relacionarnos con el otro para establecer acuerdos y normas que permitan una mejor coexistencia”.

San Francisco saturado

Con más de 20 años de residir en San Francisco, Carrera asegura conocer con propiedad las asperezas que hacen mella en la comunidad. “El crecimiento urbano debe ir acorde a las necesidades los vecinos, los Estudios de Impacto Ambiental son prioridad para garantizar la sana convivencia”, enfatiza.

El tráfico y los ruidos fueron las principales razones que la llevaron a mudarse al vecino corregimiento de Parque Lefevre, donde vive desde hace cinco años permitiéndole desarrollar una vida más cómoda pero cerca de San Francisco.

Cómo denunciar

En cuanto a la fiscalización nocturna se mantendrán tres funcionarios que operarán para todo el Distrito de Panamá en temas como violencia, riña, ruido, incumplimiento de horarios en construcción y operación comercial, casos que serán remitidos al corregimiento correspondiente al lugar del hecho.

Círculos de Paz

Entre las propuestas, Carrera prevé operar en conjunto con los Círculos de Paz, grupos de vecinos que voluntariamente se ofrezcan a organizar y proponer a los demás residentes horarios y uso de los espacios públicos.

En ello se incluye el desarrollo de actividades culturales, deportivas, festivas y comerciales en temas relacionados a horarios, límites de ruido y hasta prohibición como en el uso de servidumbres y aceras, según sea el caso.

Sanciones

A pesar de tener potestad para dictaminar resoluciones pecuniarias, Carrera prefiere el servicio comunitario como su primera opción en materia de sanciones. “Más que servir de castigo, esto obliga al vecino a integrarse, bajando así el nivel de violencia y confrontación para poder reconstruir el tejido social”, asegura.