Texto y fotos: Andreína Rodríguez
Representantes vecinales San Francisco se reunieron una vez más este viernes en la Arquidiócesis de Panamá para celebrar el sexto taller del Plan de Ordenamiento Territorial que encamina la alcaldía.
«De la conclusión de este sexto taller ya surge la norma con la que se desrrollará San Francisco», inició el encuentro Manuel Trute, arquitecto-director de Planificación Urbana del Municipio de Panamá, resaltando los beneficios que procura el estudio en favor de atender las necesidades ciudadanas en los consecuentes proyectos para el corregimiento.
Por otra parte, nuevamente grupos vecinales y asociaciones civiles manifestaron su descontento con la manera cómo la municipalidad ha desarrollado este modelo de estudio y propuestas de desarrollo urbano sin paralizar el otorgamiento de permisos para anteproyectos y construcciones en la ciudad.
«No existen las condiciones mínimas para lograr un POT concensuado que incluya el concepto de un desarrollo urbano sostenible y que garantice que sea implementado satisfactoriamente», leyó Ricardo Delvalle, residente de Altos del Golf y vocero del comité de residentes, antes de retirarse de la cita junto con un tercio de los vecinos presentes que se fueron como medida de presión hasta hasta que cumplan sus peticiones.
Al paso, el arquitecto Trute dio respuesta a varias de sus solicitudes, entre ellas reconoció la ausencia de representantes de las promotoras, factor que contribuiría a establecer un diálogo de entendimiento con los residentes. Asimismo, ofreció disponibilidad de acceso a la información contenida en el municipio, comprometiéndose a difundirla vía digital eventualmente. Y finalmente, recalcó que la motatoria de aprobación de anteproyectos y proyectos de construcción no depende de la alcaldía sin del Consejo Metropolitano, haciendo énfasis en la actuación del representante Carlos Pérez el pasado mes de enero. «Nos sorprendió cómo el edil de San Francisco atendió la situación proponiendo solo cuatro de 14 sectores que conforman el corregimiento y no abarcando el permiso de construcción per se», puntualizó.
Asimismo coincidió Pablo Ruidiaz, residente del sector, quien invitó a la comunidad a mantenerse activa para lograr extender la moratoria así como lograron derogar el pliego de cargos en el Parque Omar que incrementaría la huella de cemento, a parte de lo «oneroso» del presupuesto. Pese a la invitación de Trute, Ruidiaz optó por retirarse en espera de consolidar la paralización de obras en todo el corregimiento. «Así como dudan de la confiabilidad de los vecinos, los vecinos dudamos de la confianza de las promotoras, que no dan la cara en estos talleres», puntualizó.
Reiterando la consigna, «no se puede cambiar una llanta de un carro en movimiento», los miembros de la Red Ciudadana Urbana de Panamá (Recupa), abandonaron el taller por considerarlo «desfasado» en la medida que se continúa modificando la base sobre lo que se hacen las propuestas. Así mismo critican que se continúen aprobando proyectos inmobiliarios que incrementan aún más la actual densidad poblacional en el corregimiento sin adaptar previamente los servicios básicos.
«Aquí necesitamos que se adapten los servicios básicos, las infraestructuras viales antes de incrementar la densidad poblacional en San Francisco», señaló María Chávez, presidente de Recupa entre otras observaciones.
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