Durante semanas se escucharon quejas de la “privación de libertades” que implicaba la medida de cuarentena implementada por el Ministerio de Salud; que en Panamá sin duda, fue mucho más restrictiva que en otros países.
Si bien es cierto que muchas de las acciones instauradas por el Ejecutivo, lograron controlar por un tiempo el avance acelerado del nuevo coronavirus en el país y estas indicaciones fueron aplaudidas por muchos; no puede negarse que las implicaciones del confinamiento también provocaron graves cuadros de ansiedad y depresión en muchas personas; así como enormes consecuencias económicas.
Sin duda, era necesario flexibilizar. La pregunta es: ¿Seremos capaces de andar por nuestra cuenta y lograr al menos, mantener estable la curva de contagios, en un momento en el que los casos diarios van en ascenso?
Ahora el temor no es salir de casa sino que el virus llegue, pues el levantamiento de la cuarentena, de la manera tan abrupta en que se hizo, sin duda provocará que con el aumento de los desplazamientos en la calle, también aumente el riesgo de contagio.
Cuarentena voluntaria
Si antes las salidas para hacer compras necesarias en comercios autorizados y otras diligencias importantes, se condicionaban al género y número de identificación personal; ahora, cada quien por su cuenta, tiene la responsabilidad de salir de casa aplicando todas las recomendaciones que se han establecido a nivel mundial.
Quizás el peligro más inminente lo representa la violación del distanciamiento social. Porque usar mascarilla y gel alcoholado terminan siendo medidas relativamente fáciles de cumplir; pero qué pasa con la asistencia a lugares en los que se hace complicado mantener la distancia. Qué pasa con el control que se debe tener sobre los niños; quienes al salir se reúnen, y muy seguramente olvidarán algunos protocolos. Qué pasa con las comunidades con poco acceso a servicios como el agua y por supuesto, en los hogares en los que conviven muchas personas en espacios reducidos.
Esta realidad ha sido la misma con y sin cuarentena; pero ahora el riesgo se multiplica al haber menos restricciones en la calle; con lo cual el virus llega más fácilmente a los hogares.
Flexibilizar, aún con casos en aumento
Al día de hoy, 1ro de junio de 2020, día en que se permite a la población salir durante 13 horas al día, en Panamá se registran 347 casos nuevos, 13,463 acumulados y 336 fallecidos.
Con la apertura del Bloque 2, se reactivan actividades económicas como la infraestructura pública e industria; y se abren lugares de culto, parques, áreas deportivas y áreas sociales que cumplan con los protocolos de bioseguridad establecidos por el Minsa.
Los estamentos de seguridad se ocuparán de vigilar los cercos sanitarios y el cumplimiento de las recomendaciones para evitar aglomeraciones, sobre todo en sectores como San Miguelito y Arraiján, en los que se presentan altos índices de contagios.
Las autoridades sanitarias han sido claras al indicar que si la población no es capaz de asumir su responsabilidad individual, regresaremos a las restricciones de salidas.
Importante recordar a partir de este lunes 1ro. de junio:
- Se elimina salida por cédula, género
- No hay cuarentena los domingos
- Hay toque de queda de 7:00 pm a 5:00 am.
- Se mantienen los cercos sanitarios.
- Es obligatorio el uso de mascarilla y mantener el distanciamiento físico de 2 metros.
- Los niños puedan movilizarse de 4:00 pm a 7: 00 pm, acompañados de sus padres o cuidadores.
Teléfono: (507) 203-0770
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