Es una verdadera lotería. Y aunque hay factores de riesgo que aumentan las probabilidades de que la evolución de la enfermedad provocada por el nuevo coronavirus sea peor; hay personas que, aun siendo vulnerables, ni siquiera se enteran de haberse contagiado.
El porqué de las diferencias en la evolución de la infección aun no están claras. Un estudio reciente presentando por investigadores alemanes y noruegos sumaron a las variables el tipo sanguíneo. Tras analizar los diferentes grupos de sangre en relación con el transcurso de la enfermedad, llegaron a conclusiones preliminares que indican que la forma tan diferente en que se desarrolla la infección puede deberse a este elemento.
El estudio
La investigación incluyó a 1.610 pacientes italianos y españoles con COVID-19 con colapso respiratorio. Todos presentaron un cuadro muy grave y algunos fallecieron. Analizaron su ADN y lo compararon con muestras de sangre de 2.250 personas sanas. El primer resultado arrojó que las personas con sangre tipo A, parecen tener un riesgo alto de sufrir una evolución grave y necesitar oxígeno o respiración mecánica en caso de contagiarse. Quienes tienen grupo sanguíneo tipo «0”, podrían sentirse afortunadas, pues aunque no están libres de contagiarse con el coronavirus, según el estudio, en su caso el peligro de una evolución grave es menor. Los del grupo sanguíneo “O” son además donantes universales.
De confirmarse los resultados del estudio, se podrían desarrollar terapias farmacológicas, como se ha hecho con otras enfermedades en las que el tipo sanguíneo es determinante para adelantar los tratamientos.
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