La semana mundial de la Lactancia es del 1° al 7 de agosto. Por ello, es necesario saber todo lo referente al tema por el bien de nuestros pequeños, ya que la leche materna es su alimento primordial, el cual le aporta los nutrientes que necesitan.
El pediatra del Centro Médico Paitilla (CMP), Hermes Pimentel sostuvo que “la alimentación de pecho en el recién nacido tiene un impacto trascendente en la incidencia de enfermedades agudas, pero también lo tiene en el largo plazo tanto en enfermedades metabólicas como en neoplasias”.
Este impacto en la salud a largolo podemos medir, por ejemplo; si se da por más de 4 meses las posibilidades de que el bebé contraiga neumonía disminuyen en un 72%, las incidencias de diarreas en un 64% y las de desarrollar diabetes mellitus en un 40%.
También explicó, que la conservación y refrigeración de la leche materna es conveniente si se fracciona la leche en pequeñas cantidades (60 a 120 ml) y preferiblemente en bolsas recolectoras de leche o recipientes esterilizados con cierre hermético. Asimismo, indicó que se pueden utilizar envases de vidrio o plástico duro con tapa hermética (esterilizados al vapor) o bolsas, diseñadas especialmente para el almacenamiento de leche materna, dejando 3 centímetros libres en el envase. “No se recomiendan los frascos con tapas metálicas porque éstas no pueden ser esterilizadas al vapor o en agua hervida ya que se oxidan”.
¿Cómo se descongela y se calienta la leche que sacamos del congelador?
Para descongelar la leche materna es necesario pasarla del congelador al refrigerador, o sacarla fuera del refrigerador a un lugar fresco, para que vuelva a su estado original. Al sacar del congelador la leche materna suele separarse y no verse homogénea (similar a la leche cortada) pero al agitarla un poco se normaliza enseguida.
Para calentarla, se debe colocar bajo un chorro de agua caliente o sumergir el recipiente que contiene la leche en agua tibia. No se puede poner directamente al fuego ni en microondas, ya que pierde sus valiosas propiedades.
El doctor del CMP señaló que la negativa de un bebé a succionar el pecho es un problema que estresa a cualquier madre, pero un bebé puede rechazar el pecho a cualquier edad y sus razones para hacerlo varían según su etapa de desarrollo o incluso su salud en el momento.
El Doctor Pimentel señaló algunas razones por las cuales a veces el lactante rechaza el pecho como lo son:
- – Enfermedad en el infante; una obstrucción nasal por mucosidad que no le permite mamar bien, pues no puede respirar por la boca.
- – La vuelta al trabajo de la madrees otro cambio que puede hacer que el bebé rechace el pecho. Esta reacción es normal, tanto como la contraria (alta demanda de la madre cuando vuelve del trabajo).
- – Los cambios en la rutina familiar(problemas familiares, mudanza, visitas…) también puede provocar el rechazo al pecho.
- – Los olores de colonia o desodorante de la madre también podrían provocar rechazo, así como el ruido ambiental. Algunos niños necesitan un ambiente muy tranquilo para poder mamar bien.
En cuanto a las insuficiencias reales en la producción de leche indicó el doctor Pimentel que en la mayor parte de los casos, la preocupación de las mamás carece de fundamento. “Por tanto, antes de alarmarse, compruebe que el bebé no tiene apetito y recibe la cantidad de leche que necesita”.