Representantes de la comunidad y altos funcionarios de la Policía Nacional, se reunieron con el administración de Costa del Este para plantear problemas y soluciones en materia de seguridad y ordenamiento vial dentro de la urbanización.
Los vecinos expusieron sus preocupaciones ante las autoridades y las respuestas fueron muy satisfactorias. Con respecto al caos vehicular que se genera en varias intersecciones, particularmente durante las horas pico, se acordó asignar dos unidades de policía de tránsito para poner orden ante la ausencia de semáforos y aligerar el tranque. Asimismo, impartir boletas a los conductores infractores y controlar el exceso de velocidad dentro de CDE, sobre todo del transporte público.
La seguridad es prioridad
Varios incidentes de robos, hurtos y amenazas a la integridad física de vecinos, incluyendo niños, encendieron las alarmas en la comunidad. Durante el conversatorio se le exigió a los funcionarios policiales mayor presencia y mano dura contra los maleantes. Ante la solicitud, los representantes de la Policía Nacional aseguraron que tal y como se viene haciendo desde la última semana del mes de junio, se mantendrá la presencia de más unidades asignadas exclusivamente a CDE. Además, se facilitarán los procesos a la hora de que se planteen denuncias en la sub estación. Las rondas policiales a pie y en bicicleta también fueron reforzadas y se comprometieron a dictar charlas y talleres de seguridad ciudadana a residentes, conserjes, personal doméstico, jóvenes y niños para que aprendan a prevenir y actuar frente a posibles hechos delictivos. Entre algunos de los planes, también se planteó la colocación de cámaras de video vigilancia, la incorporación de 2 motocicletas al patrullaje, controlar más el acceso al parque Motta y mejorar su seguridad interna.