Cada 6 de enero la Iglesia Católica celebra el Día de los Reyes Magos, tradición que habla de la búsqueda que desarrollaron tres reyes magos orientales para encontrar al hijo de Dios, recién nacido en la ciudad de Belén, guiados por una estrella que delineó su camino.
Hoy, los Magos de Oriente son más que nunca un buen modelo en el que todos debemos mirarnos y reflexionar, «como estos sabios debemos ser buscadores de la verdad donde no descansemos hasta encontrar las respuestas», ha dicho Monseñor José Domingo Ulloa Mendieta, arzobispo de Panamá.
La Iglesia panameña exhorta a descubrir en qué consiste esa sabiduría que llevó a estos hombres de Oriente hasta Jesús, explicando que para ser sabios como ellos consiste primero en ser capaz de levantar la mirada hacia lo alto más allá de lo inmediato que llena nuestra vida, manifestándolo en las pequeñas cosas de cada día; la segunda forma es poner en nuestra vida una buena dosis de valentía para ponernos en camino desprendiéndonos de seguridades y costumbres que nos atan; y la tercera forma de que es ser sabio, es tener la humildad necesaria para preguntar, pedir ayuda cuando perdemos el rastro de la estrella.
El Día de los Reyes Magos coincide con el Día de la Epifanía según el calendario católico, una de las liturgias más antiguas de esta creencia que evoca el momento en que Dios hace presencia humana en la tierra a través de Jesús.