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Responsabilidad ciudadana | Aguas y basura: Una combinación fatal

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Foto: @Nbhiku

Sheila Mae Cummings de Royo | Luego de ser testigos de las inundaciones que se han dado en todo el distrito y de lo que no escapó el corregimiento de Bella Vista, deseamos hacer un llamado a toda la comunidad en general, no sólo respecto a los diversos aspectos que involucran el tema de la basura sino también en lo referente a las aguas servidas que a diario se vierten sobre las cunetas.

Todos, residentes y comerciantes, nacionales o extranjeros, debemos ser conscientes de nuestras responsabilidades como parte de una comunidad que vive en sociedad, en donde las actuaciones, ya sean procedentes de un sector o del otro, perjudican a ambos, lo que al final logra alcanzar la calidad de vida de los ciudadanos, creando además un ambiente de suciedad y dejadez en nuestras calles y avenidas.

Con relación al tema de la basura es necesario que todos contribuyamos con la adecuada  disposición de la basura, facilitando su recolección en tinaqueras “estéticas” que  sean acordes al volumen de desechos.  Recordemos que quienes la recogen no son los llamados a recolectar lo tirado, es el usuario.  Igualmente, adultos, jóvenes y niños tiran basura a la calle sin el menor recato ya sea como peatones o desde un auto en circulación.

Refiriéndonos a las aguas servidas que son tiradas sobre la cuneta y lo cual es penalizado por la ley, es vergonzoso observar que esto se da tanto en edificios de uso habitacional como en comercios, sobre todo los restaurantes, quienes en muchos casos carecen de las trampas para grasa, vertiendo todo a las tuberías, lo que eventualmente también obstruye los desagües y aguas servidas, son todas aquellas que no son fluviales o de lluvia.

Mientras no colaboremos todos, siguiendo las normas en la disposición adecuada de la basura y sobre las aguas servidas, siempre tendremos calles inundadas, con deshechos, siempre mojadas y con aguas fétidas aunque no llueva, dando un aspecto desagradable a un corregimiento que tiene todo para verse agradable y limpio, como debe ser, pero eso sólo se logra cooperando todos juntos con el Estado.